Este jueves 20 de julio, en el vigésimo aniversario de ‘Premios Juventud’, Alejandra Espinoza recibió de manos de su hijo Matteo, y sus hijos de profesión, CNCO (que nacieron e ‘La Banda’ show que ella conducía), el premio a ‘Ídolo de la Juventud’, algo que es para ponerse de pie a aplaudir, porque ella es la ídola de la verdad y la coherencia.
Es o debería ser el tipo de ídolos o de personas públicas que amamos seguir, tomar como ejemplo o admirar, porque son personas reales en el spot, personas que nos enseñan que el éxito no está en recostarse en nuestro talento, los seguidores o agarrarse de la mano de un dolor o una controversia, sino que está en buscar crecer todo el tiempo, en caerse y levantarse, sin ocultar la caída, pero tampoco regodearse de ella.
Esa misma noche Shakira se robó todas las luces, porque le dieron el premio al ‘Agente de Cambio’ y ¡Porque fue al premio!… Pero mientras en ese discurso tan bonito e inspirador invitaba a no quedarse callado, y sonaba el “pa tipos como tuuuu” dedicada al padre de sus hijos, mientras los abrazaba, seguía hablando de unidad, empatía, para luego escucharse en los pasillos los gritos de su equipo pidiendo que todos sus colegas se encerraran en los camerinos para que ninguno se le acercara, la mirara o se fotografiara con ella (aunque después hayas visto fotos con muchos).
Por eso mi spot es para la coherencia de una Alejandra Espinoza, que salió de un reality, ‘Nuestra Belleza Latina’, una Ale que si concursara hoy es posible que no pasara ni el casting. Pero supo abrazar su oportunidad, con lágrimas, sudor, muchos ‘no’, muchas burlas, se agarró de la mano de la niña que soñaba en grande en su Tijuana natal, y se preparó, creció, cambió, supo escuchar. Como te he contado que lo ha hecho el Chef Yisus.
Ella pertenece a los ídolos de verdad, los que sí tienes un ejemplo a seguir, como Leo Messi, de quien te hablé la semana pasada. Su perseverancia, compartir sus vivencias, en el momento que amerita compartirla, la hizo ser de las más queridas por el público.
Soñaba con ser presentadora, y lo logró con mucho esfuerzo, convirtiéndose en la favorita de los premios, de los shows especiales y hasta de donde ganó, ‘Nuestra Belleza Latina’. Con todas sus fuerzas deseaba ser madre biológica, y sin enfocarse en los obstáculos, ni los ya no importa el número de embarazos que perdió, llegó Matteo.
Quería correr y ser maratonista, y sin fijarse en las críticas de “¡qué flaca está!”, “¡parece enferma!”, es tan disciplinada, como estricta y sigue los consejos de sus doctores, sigue su plan de nutrición para que no le falte nada y corre, sin detenerse en lo que le dicen, ¡Más que Forest!
Quería ser actriz, y aunque sus comienzos fue como “¡Ay!”… El año pasado protagonizó ‘Corazón Guerrero’, novela hecha en la llamada ‘fábrica de sueños’, Televisa. Y descubrió, que aunque ama actuar, más ama a su familia ¡y lo dice!
No tiene miedo ni del veto, ni que no le den otra oportunidad. Porque también es ‘ídola’ en cuidar a su familia, en disfrutar ser madre, esposa, en respetar la hora de la comida familiar, pero no desde la culpa, sino desde el amor.
Sí, suena perfecto, pero seguramente nosotros, muchas de esas batallas las hubiéramos perdido al comienzo, en el medio o nunca la hubiéramos tomado, Alejandra se las agarró todas para ella, y las va librando, la mayoría ni nos enteramos cómo, solo si alguno de nosotros, los periodistas, o sus seguidores en redes se los preguntan, ¡ah! porque tampoco miente.
Ella no usa su arte para acabar con otro, o para armar un escándalo, ella nos enseña que en verdad, el que quiere puede. Por eso Alejandra Espinoza, para mí fue el spot de la noche de ‘Premios Juventud’ y la “Ídola” de la verdad y la coherencia.